El método full cost o de costes
completos es un método utilizado por la contabilidad interna o de gestión para
valorar las existencias que se producen en la empresa. La elección del método
de valoración es de gran importancia ya que hará variar de forma considerable
los costes de los productos, su valoración en el balance y, por consiguiente,
los resultados de la empresa.
El método full cost considera
tanto los costes directos como los indirectos relacionados con la producción
aunque también se pueden añadir aquellos costes no directos con las producción
ya que existen distintos tipos de full cost.
- Full cost literal: Considera todos los costes de la empresa y los imputa a los productos fabricados ya sean costes relacionados o no.
- Full cost industrial: Sólo tiene en cuenta los costes relacionados con la producción.
Históricamente, el modelo full
cost o de costes completos ha sido el más utilizado ya que es el más sencillo
de emplear aunque tiene ciertos problemas en cuanto a la precisión de las
valoraciones de las existencias que otros métodos solucionan.
El siguiente ejemplo se realiza
empleando ambos métodos para ver las diferencias en la valoración y las
repercusiones para el resultado de la empresa. En post futuro se ofrecerá el
mismo ejemplo con distintos métodos para tener una visión mayor sobre las
ventajas e inconvenientes de cada sistema. En el siguiente ejemplo se producen
200 unidades pero sólo se venden 150 durante el periodo de estudio.
Como podemos observar, el margen
bruto según el método de full cost industrial es menor ya que considera los costes
de administración como costes del periodo y los incluye por completo mientras
que el método de full cost literal no incluye todos los costes de
administración ya que parte de estos costes los incluye como mayor valor de las
existencias que quedan en la empresa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario